De 1 Idea al Millón: Cómo Transformar tu Vida Personal y Financiera
9 de octubre 2024
7 de julio | Por Juan Merodio
Cuando planificamos una campaña de marketing siempre buscamos acciones de cara al cliente, sin pararnos a pensar que debemos usar todos los elementos a nuestro alcance, desde lo más cercano a lo más lejano, y lo primero de donde debe partir esta estrategia es de las personas que trabajan en la empresa.
Por ello, hoy me gustaría hablaros de endomarketing digital, que podemos definir como el conjunto de estrategias y acciones de marketing digital enfocadas a mejorar la relación y el bienestar interno de los trabajadores y colaboradores de la empresa (crowdsourcing), con el fin de implicarlos en el negocio para generar una mayor motivación, mejora de productividad y con ello clientes satisfechos.
Al final se trata de marketing interno, en el que muchas veces no nos paramos a definir estrategias, cuando es el primer paso que debemos hacer previo a cualquier acción de marketing externo, y donde el briefing de endomarketing debe partir de las siguientes premisas:
El endomarketing digital debemos trabajarlo en tres vías complementarias, todas necesarias para aprovechar al máximo su potencial:
Gran parte de las herramientas que usamos de cara acciones de marketing al cliente, podemos emplearlas también en nuestro cliente interno (trabajador) y podemos destacar las siguientes:
El endomarketing digital debe aplicarse tanto a grandes como pequeñas empresas, donde además las pequeñas cuentan con la ventaja de ser más ágiles y poder convertir esta estrategia en un canal de innovación interno.
Y recuerda que el cliente interno es lo primero para que un negocio funcione, y ellos son la imagen que proyecta la empresa hacie el exterior, porque como ya decía Zig Ziglar «You don´t build a business, you build people and then people build the business».
¿Has establecido alguna estrategia de endomarketing digital en tu empresa?
Juan Merodio
Juan Merodio es experto en Marketing Digital y Divulgador de Negocios Digitales (IA, Web3 y Nuevas Tecnologías). Ha fundado la empresa que lleva su propio nombre, Juan Merodio, y desde donde él y su equipo coordinan y desarrollan consultoría de negocio en Marketing y Transformación Digital para empresas en distintas partes del mundo como España, Latinoamérica, Japón, Canadá y Estados Unidos.
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4 Comentarios
Creo que uno de los aspectos básicos es la motivación de los trabajadores, sobre todo en esta época de impagos y retrasos. El modelo empresarial ha estado centrado en las motivaciones económicas o de corto plazo y, ahora que en muchos casos no es una opción posible, se ven incapacitados para que sus trabajadores, en realidad los pilares de la empresa, encuentren un tipo de motivación más allá de la económica, ya que ha sido la única que como empresa les hemos mostrado.
Los empresarios deberían pensar por qué un trabajador decide continuar en su puesto de trabajo, descubrirían que les importan muchos más factores que el económico o el miedo a quedarse en la calle. Pero claro, eso implica una profundización que a menudo nadie realiza, una autocrítica para la que el sistema capitalista no está preparado.
Un saludo.
Eso es muy relativo. Actualmente los trabajadores insatisfechos aguantan en sus puestos de trabajo porque saben que si lo abandonan, pueden estar años parados, y aunque reciban tarde sus correspondientes salarios, si se van, pierden los derechos.
Ademas de ello, actualmente hay gente trabajando por sueldos ridiculos, y ahí estan porque no hay otra cosa, y si ellos no aceptan el puesto, vendra otra persona detras que si que lo acepte.
Esta epoca no va a cambiar hasta que la gente deje de aceptar sueldos y puestos de trabajo ridiculos, aunque por desgracia a la gente ya le da igual con tal de echarse algo de comera la boca y pagar un par de facturas.
He conocido un caso de una empresa que pagaba con bastante demora a sus empleados, pero les regalaron un curso para formarse, curso que daban en la misma empresa, y la gente murmuraba que se dejasen de tanto curso y que les pagasen en las debidas fechas.
La gente quiere dinero, y punto, porque el dinero es lo que les da de comer y con lo que pueden vivir, y no hay mas.
Entiendo perfectamente lo que dices, Raul, pero al final tener sueldos ridículos no es la solución, ni para los trabajadores, que no llegan a fin de mes, ni para las empresas, que en un país que envejece tan rápido como España, solo provoca que se despida a la gente en busca de alguien más joven y barato, o al contrario, que por no ofrecer un salario justo y oportunidad de crecimiento en la empresa, sean los propios trabajadores los que se marchen buscando campos más verdes (pasa menos, pero pasa).
Por mi parte, el que me ofrezcan un sueldo ridículo por un trabajo desmesurado, ha provocado que me replantée cómo actuar; con un sueldo de 800 euros ni llego a fin de mes, ni puedo ahorrar para pagarle a mi hijo sus necesidades (ya no digamos la uni, a cuatro años vista), ni puedo pagar un alquiler. Lo peor de todo es que tampoco estaría satisfecho a nivel vital trabajando con una empresa que, sabiendo que tiene que realizar cambios en su estructura, no lo hace, empeñada en que volverá todo a ser como antes, algo que veo improbable.
Va a ser más duro autoemplearme o emprender (aún está por ver hasta dónde llegaré, o si será una hostia monumental), pero, sinceramente, es un poco eso de morir de pie o vivir de rodillas. Educar a una generación con la premisa de que es lo que hay, no creo que beneficie a nadie.
Un saludo.
Me gusta el concepto endormarketing y el enfoque que le has dado Juan, lo has matizado a la perfección, enhorabuena. Como Raúl y Juan Carlos, creo que el panorama existente en las empresas está algo lejos del concepto que describes en el post. La cultura empresarial que hemos tenido durante mucho tiempo se olvidó del activo más más importante que tiene la empresa, el trabajador, aunque tampoco veo justo culpabilizar sólo al empleador y me permito hacer mención al dicho «ni nadie es es tan malo como lo pintan ni tan bueno como parece» es decir, también existen trabajadores que acuden sus puestos de trabajo sin motivación ninguna, por lo que este es un asunto en el que las dos partes han de aportar su grano de arena, entendiendo que las circunstancias y la realidad empresarial ha cambiado pero no por ese motivo se deba justificar el que las cosas no puedan ir a mejor, debe existir una comunicación y una confianza verdadera entre las partes, sino no tiene sentido, ¿o es que cuando compramos algún producto o servicio lo hacemos desde la desconfianza? ¿tendría sentido adquirir algún bien a sabiendas que nos están dando gato por liebre? La confianza es el pilar básico de toda relación humana y eso no se construye en dos días. Para mi, ser empresario es principalmente saber gestionar equipos de personas.
Saludos!!